viernes, 15 de abril de 2011

VER EL MUNDO CON OJOS DE NIÑO

Hoy quiero compartir con Ustedes una experiencia maravillosa, tuve la gracia de que el universo me colocara en el momento y tiempo precisos para compartir con la historia de una persona.

Es realmente satisfactorio poder tener una conversación de corazón a corazón con otra persona, no es necesario tener guiones ensayados o poses estudiadas, lo único que se necesita es hablar sinceramente.

En esa conversación una amiga, de manera espontánea, sacó de su cartera un sobre, en él, guardaba una serie de poco más de 10 fotografías viejas, y cuando digo viejas, no mal interpreten, eran fotografías de sus padres, hermanas, incluso de ella cuando era pequeña, algunas mas nuevas que otras, pero todas absolutamente todas valiosas, el valor de cada una de ellas aunque estuvieran dañadas por el tiempo, es inmesurable para ella, allí entre tonos y escalas de grises y sepia, transcurrió en unos minutos la historia de sus padres y su vida ante sus ojos... que honor para mí, que me permitiera conocer esa parte de su vida.

Una de sus fotografías me puso a pensar y es la que da el nombre a este artículo de hoy, era ella, de poco menos de 5 años, sentada, con su carita infantil y su mirada brillante, una mirada que se perdía en el horizonte, que parecía que se salía de la imagen y trataba de encontrar algo, una mirada de esperanza, una mirada de ilusiones, una mirada de sueños.

Recuerdan cuando eran niños? probablemente NO!, ese es el problema! y es que nos parece que fué hace tanto tiempo...la mayoría no recuerda o se averguenza de recordar que jugaba en la lluvia, o soñaba ser presidente o reina de belleza, maestra de escuela, médico, abogado, tantas ilusiones!, tantos sueños!, tantas ganas de vivir, de comerse la vida a pedazos como una torta, y luego pasan los años, vienen las responsabilidades, somos adultos, profesionales, y entonces a la mayoría le averguenza reir a carcajadas o bailar como si tuviera un tornillo flojo, o cantar con los amigos haciendo un trío que aunque ni se aproxima al original a nosotros nos suena maravilloso.

debemos volver a ver el mundo con ojos de niños, debemos retomar nuestros sueños, nuestras ganas de vivir, los ánimos para levantarnos cuando estamos cansados, las ganas de reir, soñar despiertos, compartir sin esperar nada a cambio, brindar amistad, dar abrazos, decir te quiero, mojarnos en la lluvia y levantar la cara hacia el cielo para que cada gota que moje nuestro rostro nos recuerde la maravilla de estar vivos, nos recuerde agradecer a Dios por hacernos seres humanos únicos y maravillosos y nos llenemos de energía divina para seguir adelante, hasta que Dios quiera.

Guarden sus fotos!
La Historia de cada ser humano puede ser contada de muchas maneras, cada persona que conocemos tiene una parte de ella, pero sólo quien la vive tiene la historia, las fotos y la película completa y lo más importante, tiene la opción de cambiar el desenlace en cualquier momento. Sólo nosotros podemos decidir ser dueños de nuestro destino.

Mayra Herré